“Cuanta más nieve cae, más cielo cerca” cantamos en uno de los himnos de vísperas del tiempo de Adviento, y este verso se ha hacía vida en la mañana nevada del 9 de enero, cuando en medio de la nieve que nos llegaba a las rodillas, recibíamos la noticia de que en el hospital Nuestra Señora de América, había fallecido a causa de un infarto, el padre Francisco Anta, de la comunidad Vizconde de los Asilos.
En este año de la Palabra y en las vísperas de celebrar por segundo año el Domingo de la Palabra instituido por el Papa Francisco, el padre Anta, como era conocido por todos, gran apóstol de la Palabra, como se han referido muchos, partía a la eternidad un día después de haber cumplido sus 85 años de edad, dejando en nosotros la inquietud de poder ser verdaderos servidores de la Palabra de Dios.
Entre los servicios apostólicos que desempeñó es de mención la considerable gestión que realizó durante casi 30 años al frente de la SOBICAIN en la que dedicó a la difusión de la Biblia en todo el mundo y desde donde llegan hermosos testimonios de su arduo celo por la propagación del Evangelio.
Sumado a ello, es de notar su trabajo misionero en Argentina, país al que fue destinado justo después de su ordenación sacerdotal en 1961, en donde se desenvolvió en varias áreas del apostolado paulino hasta 1973 cuando regresa a su España natal, en donde fue superior provincial por dos mandatos.
En el año 2019, durante la Feria Liber recibió el Homenaje de la Comisión de Editores del Libro Religioso por su labor al frente de SOBICAIN (Sociedad Bíblica Católica Internacional). A la intercesión del padre Anta nos confiamos en este año especial en el que, como Familia Paulina, dedicamos para que “la Palabra de Dios siga avanzando”.